Los Sonidos forman LA Música 2

Aquí me pongo a cantar,
al compás de la vigüela,
porque el hombre que revela,
que ha salido del armario,
alejáo y solitario
con un Fierro se consuela.

Versos del Martín Fierro (José Hernández se revuelca en su tumba)

¿Donde está Martín? ¿Y donde el Fierro?
Seguramente están muy juntos, más juntos de lo esperado.
Y sí, es que muchos hablaban mal de Martín por detrás suyo. Pero el problema es que hubiera tanta gente detrás suyo.

Cambiando de tema, sigamos con lo de La Música.
Como dije en la primera parte, los sonidos juntos forman distintas composiciones.
Está el ruido molesto, entre los que se prensenta el molesto motor de un tractor y el aún más molesto Miranda!. Otra variedad es La Música, como la de Beethoven y Charly; y la música con mensajes subliminales, que sería como el gemelo malvado de La Música, donde está tanto Xuxa como Barney. Seh, nadie zafa.
El ruido, si no es un pedo en mitad de la clase de Lengua, a nadie le interesa. Los subliminales los dejamos para después.

Así que vamos al Té.
Al tema*
Al tema ¡que coete!*
Que nos compete*

Así que vamos al tema que nos compete: La Música. Y donde hay Música, hay Músicos.
Muchos Músicos han dejado su huella en la historia. Tal es el caso del olvidado y nunca bien ponderado Julio Tadeo Winery.

Julio fue un músico que pasó a la Historia. La Historia era su abuela, y la pasó en respecto a la altura.

Winery nació en... eh... nacio eh... eh... Nació. Era el menor de sus hermanos. Sí, cuando nació seguro era el menor. Hasta que casualmente nació su hermano Martín, del que ya hablamos antes.

Julio Tadeo ("Boloo" para los amigos) decidió ser músico desde muy pequeño, a los 35 años; edad a la que se recibió.
Digo, recibió tal decepción al darse cuenta que el único instrumento que tocaba bien era la gaita, y con bien me refiero a que era igualito al grito del Monstruo del Lago Ness en época de apareamiento.

Cómo sentía que su vocación era la de músico, fue a La Academia, que en cualquier momento va para el descenso ("La Acadé" para los amigos).

Cuando salió de la academia (a las dos horas, ya que lo echaron a saxofonazos) empezó a componer.

Su padre no quería que su hijo fuera músico, ya que no era sordo, y le dijo que eligiera entre La Música y su familia. Eligió a la música, para desgracia de ambas. Por lo tanto su padre le pidió que cambiara su nombre; y Julio lo cambió por Julius Thadeus Winerinsky.
Su padre le mandó una carta diciendo que asi no sólo sabrían que era su hijo, si no que sabrían que su hijo era un idiota. Así Julio cambió su nombre por Klaus Müller, arrastrando miles de homicidios bajo apellido Müller.

El Update me quedó larguísimo nuevamente, así que me despido de ustedes mis inexistentes lectores, hasta la próxima.

PD: Ahora que tengo internet nuevamente, los updates salen como piñas!